¿Por qué necesito obtener los permisos municipales para construir mi vivienda?

Amigos, una pregunta frecuente que recibo de mis clientes es: ¿Por qué necesito obtener permisos del Municipio para construir mi vivienda, si la mayoría de las personas no lo hace?

La primera respuesta es la que el cliente no quiere escuchar.

Si decide construir sin los permisos correspondientes, obtendrá una multa que según el Municipio de Loja, acorde al último plan de uso de suelo aprobado en 2021, alcanza el 25% del valor de la construcción. Es decir, si usted construyó su casa sin permisos y está avaluada en 50 000.00 dólares. La multa correspondería a 12 500.00 dólares. La misma que puede ser cancelada al momento de pagar el impuesto predial o en la venta de la propiedad.

Pero este escenario sería el último recurso. Ya que es posible legalizar la construcción mediante la obtención de permisos, aunque éstos sean posteriores a la construcción, pero deberá modificarla para que cumpla con las normas. Ahora, la desventaja es que puede resultar costoso, ya que por ejemplo, tendría que derrocar paredes o retirar techumbres que ocupen los retiros, etc. Evidentemente constituye una desventaja porque perdería área construida en la vivienda y la inversión realizada se esfumaría.

Por lo tanto, parece lógico optar por la obtención de los permisos, ¿verdad?

Aun así, existe una razón más para hacerlo y que considero es la más importante.

Cumplir con las normas municipales garantiza que el edificio tenga buenas condiciones para ser habitado. Hace posible que la construcción sea revisada por profesionales (arquitectos, ingenieros civiles). Y permite que la propiedad aumente de valor en el tiempo. Por otro lado, una construcción sin permisos no se revaloriza ni es factible de vender ya que no es legal ni garantiza seguridad y funcionalidad. Piense, ¿Quién querría comprar una propiedad que no está regularizada?

Es muy común observar que edificios auto construidos tienen problemas de iluminación, humedad, integridad estructural, distribución deficiente de los espacios, entre otros.

El proceso de aprobación de un proyecto arquitectónico incluye tres etapas principalmente.

1. Obtención de certificado de regulación y control urbano (línea de fábrica). El cual detalla todas las regulaciones que se deben cumplir.

2. Planos arquitectónicos de la edificación desarrollados por un arquitecto. El mismo que se será revisado por un arquitecto municipal.

3. Permiso de construcción, es básicamente un contrato entre el cliente y arquitecto. Busca garantizar que la construcción se haga bajo supervisión técnica.

Si el arquitecto a cargo del diseño, el que usted contrata, estudia a detalle todas las normas y presenta un proyecto factible. El tiempo de aprobación tomará alrededor de tres semanas. De lo contrario, puede tomar meses.

Por supuesto si el proyecto es de alta complejidad, se requerirán más procesos.

Finalmente, ahora conoce las ventajas de hacer aprobar su proyecto en el Municipio.